Tras dejar unos días el magnífico texto de Chals sobre "el rey yanqui" dando la bienvenida al espacio, toca recuperar la entrada -convenientemente limada- del que suscribe (oct/2011 en el Citizen) sobre el adorado estreno de 1977. Y es que sí, admito sin reservas que me guardé con toda la intención el que las primeras reseñas (que no únicas, por otro lado y adelanto ya) de "My aim is true" y "Trust" corrieran por cuenta de su humilde servidor. Son mis dos elegidos para la gloria desde hace largos años y al hacer recuento. Entiéndase. Lo que si confieso, antes de rebozar el texto de turno (aunque propio por lo menos en esta ocasión), es que siempre me ha fastidiado un algo que el MacManus no hiciera un par o al menos un disco más en esa línea... De forma completamente egoísta por supuesto, y de hecho es posiblemente eso, el que ello no sucediera, un motivo más para otorgar esa vitola de "único" al aquí sagrado estreno del gafotas. Creo que desde el momento en que decido realizar un blog temático-costelliense se sobreentiende que no soy sospechoso de opinar nada malo de los Attractions pero, leñe... Aquí están Buddy, Chuck, el otro Elvis, el Declan más beat y rockabilly, el Costello más básico, efervescente y directo posible... Un regalo eterno, en definitiva, sean o no sinceras sus intenciones y aún asumiendo que al ser atacadas (a posteriori) por los Attractions estas canciones ganan una energía que, aunque distinta, resulta incluso superior.
Desde las entrañas de la díscola Stiff Records (algún día tengo que poner algo sobre como las gastaban promocionando a sus artistas) salieron en algún momento del segundo lustro setentero una serie de músicos con dispar suerte pero indiscutible calidad (los Lowe, Parker, Dury, Wreckless y demás). Pero este miope flacucho, vestido de oficinista (que lo era) y padre ya a los veintipocos, era sin duda "la niña bonita". Todos sabían que lo iba a petar, que estaba varios escalones por encima (me encanta Lowe y ahora saldrá alguno "pues Lowe es mejor porque...", vale si, y unos cojones, sigamos). Y la razón principal era lo asumido que tenía los tics en su manera de componer y interpretar/cantar ya a tan tierna edad (da miedo escucharle ya aquí -en el disco de cabecera de post- cuando emula al Rey en "mystey dance" o "(...) Red shoes"). Tenía las canciones, tenía la manera de cantarlas, faltaba la banda... No problem, se arrenda a los countrescos Clover (futuros, no se lo pierdan, Huey Lewis & The News) como músicos de estudio y a triunfar como la pepsi (la coca-cola le llegaría con el siguiente disco y con los Attractions de regalo).
"My aim is true" es, sin duda, uno de los discos que más veces jamás haya escuchado (y mi favorito por defecto del palomo junto a "Trust" del 81), así que esto debiera ir rápido. En él encontramos pop acelerado, rocanrol de manual, rockabilly, dejes souleros a mansalva y un espíritu que, por si lo que precede parece poco, casa sin problemas con los arribistas punkies británicos de la época. Mis debilidades más sentías son "miracle man", "waiting for the end of the world" o ese "hit de barberia" (como me gusta llamarlo) titulado "sneaky feelings". Pero, claro, queda todo pelín eclipsado por contener esa "Alison" que le inmortaliza para los restos (esa guitarra acompañando a la despedida ha nacido para no olvidarse). Destacan igualmente (y si se quiere jugar a "destacar" cosas, que esto te lo ventilas de cabo a rabo tan ricamente y las veces que hagan falta sin levantar la aguja) "no dancing", "(the angels wanna wear my) red shoes" o "less than zero" (que inspira el título de la novela de Ellis, si), a cual más enfermizamente adictiva. Antes, por eso, le dio tiempo de darte la bienvenida a la semana laboral a toda mecha y su menos de minuto y medio y, por el camino, además, te soulea de lo lindo con "blame it on cain" o "pay it back"... o te marca un rocanrol old scholl con "mystery dance" o, también, te adelanta algo de lo que nos deparará en el futuro inmediato con las invasiones entre (sub)géneros de "I'm not angry". Y tan sobrado va el condenado que hasta se marca un hit a lo dub-jamaicano con la conocida "watching the detectives" que entraría en revisiones ulteriores de la edición original del álbum. En resumen, tras "my aim" llegarán los dos pelotazos más conocidos en cuanto a álbumes, o generalizando al menos, pero aquí tenemos a un Costello más hambriento que nunca (obvio), con unas canciones más "desnudas" en cuanto a producción que nunca igualmente (todavía sin los teclados de Nieve ni el marchamo trotón de los dos Thomas), y una vitalidad en su manera de interpretar los temas para la que no hay dinero. Y es que, al fin, cualquiera de los seis primeros costellos con material original (que "almost blue" también es la reoca, ojo) me parece brutal pero, por alguna razón, a éste es fácil cogerle especial cariño. Este Elvis no es el Rey pero sí el "miracle man", amén de mi músico predilecto -por su producción en el último trio de décadas y algo más-, y si a alguien le parece poca cosa allá el/ella con su rollo pero a mi, y a estas alturas de la comedia, ya no me bajan ni bajarán del burro ni a tiros. In Elvis Costello we trust, of course.
El más pop y ariado de sus discos. se nota su juventud. Todavia intenta encontrar su estilo pues es manifiesta la influencia del pub rock , pero con una gran diferencia sobre los de dicho estilo Elvis es un genio y las canciones de este disco son impagables. Igualmente se encuentra un paso adelante sobre las demos Flip City demos lo que demuestra que crecia como artista muy rápido
ResponderEliminarRecuerdo esta entrada y clave en mi devenir costellero.
ResponderEliminarQue decir de My Aim Is True? Que decir de Allison? Que decir de Red Shoes? Que decir de Welcome To The Working Week? Que decir de Waiting For The End OF The World? En fin, la rehostia en verso.
22 tacos tenia el sujeto cuando parió esta obra maestra generacional. Rabioso, inteligente, crudo, potente...Uno de kis favoritos de Elvis sin dudar. Ademas, no pasa el tiempo para el. Siempre suena fresco, directo, genial.
Discazo imprescindible. No se que les daban de comer en las islas en aquellos años ...
ResponderEliminarOtra Brick in the Wall imprescindible del gafotas!AUnque le tengo menos escuchado que ptros discos.Me voy a tener que marcar un post sobre Costello, para poder verlo publicado aqui!!!Un honor.
ResponderEliminarA+
Por cierto gracias por la dedicatoria en "Imperial"...Thank you again!
ResponderEliminarA+
Me siento rejuvenecer cada vez que escucho este disco.
ResponderEliminarGuzz, ahí te mando un link de mi blog con las notas calentitas del disco en cuestión.
javierfuzzy.blogspot.com
Saludos,
JdG